Son espacios fabricados de paneles frigoríficos de fácil montaje, de tamaño establecidos. Los paneles frigoríficos consisten en paneles sándwich de poliuretano (PUR) con chapa de acero galvanizado pre-pintada en ambas caras, lo que garantiza el aislamiento térmico y impermeabilidad (evita el ingreso de humedad al interior de la cámara).
Ventajas de las cámaras frigoríficas modulares
El concepto modular de una cámara establece una rápida selección de la misma, pudiendo configurarla a dimensiones de ancho y largo ya establecidas.
La altura estándar es de 2500 mm.
- Facilidad de montaje y desmontaje: El montaje de las cámaras modulares es sencillo, los paneles se suministran desmontados y el ensamblaje en el sitio consiste en unir un panel con el otro mediante ganchos de seguridad.
- Eficiencia energética: El diseño de las cámaras frigoríficas modulares permite un uso eficiente de la energía, lo que se traduce en un ahorro en los costes operativos de hasta en un 25%.
- Higiénica y de fácil limpieza: Gracias al sistema de unión, el panel queda protegido ante la oxidación y/o deterioro prematuro. El acabado perfecto que posee facilita la higiene de la cámara.
- Paneles: Tipo sándwich de 100 mm de espesor estándar.
Los paneles de poliuretano cuentan con un sistema de unión de tipo machimbrado y reforzado con ganchos CAMLOCK de plástico y acero galvanizado.
- Equipo de refrigeración: Cuenta con equipo de refrigeración compacto o dividido, con un compresor rotativo tipo hermético, marca BOYARD o similar.
